EDITORIAL: Virtudes urgentes

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Por Javier Abanto Silva, OP.

“¡Radiante flor del suelo americano que diste olor de augusta santidad;

gala y blasón del pueblo peruano; que en ti encendió la antorcha de piedad!

Protégenos, tu caridad sagrada todo el Perú ardiente en su emoción;

si viene a él tu excelsa llamarada de un pueblo hará tan sólo un corazón.

Te dio el solar de Rosa, la divina cuna de ardor para tu noble afán;

Tu fe sin par, su alma peregrina; pasión de Dios, Domingo de Guzmán

hoy como ayer, por tu virtud, reciben pan y verdad,

los pobres de tu amor hoy como ayer,

para tu gloria viven bendícelos y ampara su dolor.”

Fr, Javier Abanto Silva, OP
Promotor de medios de comunicación
SODOMCO

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Así se canta a San Martín de Porres, el peruano más ilustre por sus virtudes y no por las encuestas, aunque así como van necesitamos más personas comprometidas con el bien común.

Según las últimas encuestas cae la popularidad del Presidente, del fujimorismo, del Alcalde de Lima. De esta manera se está planteando otro escenario político, con esperanza y optimismo por un lado mientras que por otro la desesperación y el miedo a lo que se revele en la investigación de la justicia brasileña referida al expresidente de la constructora Marcelo Odebrecht.

Terminamos el mes morado e iniciamos el mes de San Martín de Porres. Al respeto, existe un cuadro de la “glorificación de San Martín de Porres” pintado por Fausto Gontí expuesto en el Vaticano el día de su canonización (6 de mayo de 1962). Algo bueno a imitar de alguien santo.

1. Fray Martín, hermano. Con las manos en oración y su hábito con escapulario negro, de hermano cooperador. Su humildad y su afán de servir lo hizo llamar “Martín de la caridad” (Juan XXIII).

2. En el marco del cuadro también aparecen dos ramos: el olivo que significa la Mortificación y la flor de la violeta para evidenciar la humildad.

3. Símbolo de paz y unidad social. En San Martin de Porres se funden dos estirpes, dos razas, dos mundos y mientras que en su rostro se acentúan las diferencias de ambas. Dos mundos que circunstancias históricas y raciales han mantenido separadas se estrechan en Martín y proclaman al mundo la profunda e íntima unidad de toda estirpe humana que ha sido creada a imagen y semejanza de Dios y redimidos por la misma sangre de Cristo nuestro Salvador.

4. Escudo Dominico: en la parte superior del cuadro está pintado el escudo “Capatus” que tiene la figura de la capa del hábito dominicano, famoso en aquel tiempo. En la parte inferior izquierda el Escudo Español para mostrar la patria de su padre Juan de Porras, caballero español de la Orden de Alcántara. Y el Escudo Peruano: luce en la parte inferior derecha con los símbolos de la tierra que lo vio nacer, un 9 de diciembre de 1579 y morir el 3 de noviembre de 1639. La unión de dos razas manifestada en un carisma dominicano.

5. Patronazgos. Barberos y peluqueros. El artista plasma el peine, la tijera y la navaja; instrumentos propios del oficio del cual es patrón y maestro. También el símbolo de la medicina para honrar a su oficio de enfermero desde donde socorría a muchas personas.

Necesitamos de estas virtudes: ser buen hermano, la mortificación, la humildad, la paz y la unión social, el respeto, la tolerancia, etc… Con estas virtudes no creo que alguien bajaría en las encuestas. Ah, me olvidaba, están plasmados también los ratones, por el amor del santo a la creción.

P. Javier Abanto Silva, OP

Promotor de medios de comunicación – Sodomco

Lunes 31 de octubre de 2016